martes, 29 de diciembre de 2009

Cazuela de Mariscos

En el Centro abundan las pescaderías... algunos personajes entrados en años me cuentan que era el equivalente del Crepes hace bastante tiempo. Supongo que también influye la colonia de habitantes del pacífico por esta zona (acá una crónica sobre una pescadería del centro) sea cual sea la explicación la cosa es que la proporción de estos restaurantes casi compite con la de caseros.
Personalmente nunca me meto a ninguna que no haya sido recomendada por algún conocedor, por alguna razón se ven como ancladas en el pasado, con sus paredes en baldosín y azulejos que no auguran una comida excepcional.
Pero también es cierto que tanta competencia debe traer como resultado precios más bajos y/o un aumento en la calidad de lo que se sirve (por aquello de la diferenciación).



Uno de estos sitios es Brisas del Caribe, que queda en la Carrera Octava con 21 más o menos, en una esquina. De allí me gusta la abundante Cazuela de Mariscos, cuyo tamaño mediano es barato (unos 9000 pesos) y es más que suficiente además que viene con patacón y arroz (perfecto para mezclar en la salsa). No olviden adicionar picante, que le da su delicioso toque al plato.



Otro de los platos bandera es el Filete de Róbalo que viene en salsa de ostras, cangrejo, camarón y no sé qué más... y es bastante grande y delicioso; es más costoso pero queda apenas para un almuerzo especial de viernes.

viernes, 25 de diciembre de 2009

Mantecada de la Tía Flor

Mi familia materna es de Cáqueza y recuerdo que en las épocas especiales (vacaciones o navidad) era tradicional preparar la Mantecada desde cero prácticamente porque a los niños nos ponían a cosechar el maíz, la abuela lo dejaba listo para moler, se hacía la mantequilla con la nata de la leche ordeñada en las mañanas, los huevos se sacaban del gallinero... mejor dicho, más artesanal para dónde. En la actualidad todo es más sencillo, se va uno al supermercado y listo. Lo importante es que a pesar de eso, el sabor sigue siendo el mismo, aquel al que me acostumbré en la infacia. Si me preguntan a qué sabe la navidad tengo que decir que a mantecada de la tía Flor, que fue la que le enseñó la receta a mi propia abuela. Y en homenaje a la receta que va pasando de generación en generación (no degeneración), actualizada para los avatares modernos, acá va la que usamos en la familia, que tanto gusta, que le he preparado a la gente que quiero y que me han acusado de comprar porque eso tan rico no debería salir de las manos de un ingeniero (desde aquí unas gracias a mi querida tía y gran cocinera Flor García):

Ingredientes:

  • 1 lb de Harina de Maíz
  • 1 lb de Azúcar Pulverizada
  • 1 lb de Mantequilla
  • 10 Huevos
  • 1 Copa de Aguardiente
  • Rayadura de un limón



Preparación:
Se mezcla la mantequilla con el azúcar, a mano, hasta formar una crema. Se agrega seguidamente la harina y se sigue mezclando. Los huevos se agregan de manera segregada, primero las yemas, una a una revolviendo y cuando se terminan las yemas, se agregan las claras que se batieron aparte a punto de nieve. Cuando se tiene la masa homogénea, se agrega la copita de aguardiente (aunque se puede practicar con otros licores, este es el tradicional). Finalmente, se le agrega la rayadura para darle algo de sabor adicional.
Lo siguiente es meterla al horno, acá difieren las recetas familiares, pero normalmente la temperatura es media para que se cocine uniformemente. Hay que estar mirando que la superficie se dore; meterle el cuchillo de vez en cuando a ver si sale masa cruda o no (hey es una receta tradicional). Noten que no se usa polvo de hornear... la idea de la mantecada es que sea bastante masiva (densa), pero esto es opcional.
Y listo!, lo siguiente es servirla, bien sea sola, con café o con helado y he tenido ganas de empaparla, una vez hecha, con un triple sec (probablemente Cointreau) para hacerla más alicorada, pero esas ya son variantes que intentaré luego.



Y como es navidad, los dejo con un video en el que unos niños preparan la versión alemana de la mantecada (In der Weihnachtsbäckerei traduce algo asi como En La Panadería Navideña), tipica canción que le enseñan a uno en el Goethe para estas épocas.

Felices Fiestas!!!.

martes, 22 de diciembre de 2009

Cisoria

Quién dijo que la comida fusión debe ser cara? En el restaurante Cisoria, sobre la calle 11 arriba de la 4 (digamos que diagonal suroriental a la entrada de la Luis Angel Arango) hay un espacio para que lo costeño, la fusión y un ambiente agradable se encuentren.



Este es de esos restaurantes que me gusta descubrir poco a poco; voy pidiendo distintos platos cada vez que vengo y hasta ahora no me han defraudado. Su sazón es deliciosa y la presentación impecable. Mi plato favorito es el chanchito a los pimientos (ver foto abajo), es cerdo en pimientos y cebollas ligeramente caramelizados, por lo tanto su sabor tiende a ser agridulce y va acompañado de arroz con fideos (aunque también se puede cambiar por arroz con coco), yuca frita y ensalda, todo espolvoreado con algo que me parece es paprika, en dosis que no lo alteran y le dan hasta cierto refinamiento.



Como entrada les recomiendo las carimañolas o los patacones en hogao y suero costeño y el postre suele ser de arazá o alguna otra fruta asi medio desconocida para la generación de la guayaba.
Si me preguntan por qué se llama Cisoria, debo decir que no tengo ni idea, pero por curiosidad me puse a buscar en google y encontré que hay un tratado que data del año 1423 sobre cómo cortar debidamente los alimentos y su nombre es arte cisoria y al parecer es bastante conocido en los medios culinarios... yo creo que es la apuesta más segura, además del cuchillo que exhibe su logotipo... pero prometo preguntarle al dueño.

Actualización: La pechuga cartagenera, con una salsa a base de hogao y aceitunas también me gustó y nada que le pregunto al dueño.

Actualización 2: Probé la pasta con frutos del mar, deliciosa pero le subieron a todos los precios, ya no es tan barato como antes ir a Cisoria, aunque sigue siendo costeable (promedio del plato: $13.000)

Actualización 3: Como que lo cerraron... o lo trasladarían?



Actualización 4: Y no aparece por ningún lado; como que si lo cerraron, cosa que es lamentable pero muy común en la no tan larga ni glamorosa vida de los restaurantes.

viernes, 18 de diciembre de 2009

Corralísima

En el género hamburguesas, muy mentado los viernes que solemos buscar este tipo de aventuras gastronómicas, una de las ganadoras es sin duda la Corralísima de El Corral. Primero por ser hecha a la parrilla, lo que le da un sabor único y además porque su versión 320 gramos, rebosante de carne (la de la foto) le calma el hambre a cualquiera. Para acompañarla siempre pido una porción de frijol refrito por aparte, pues me parece delicioso tanto con las papas como con la hamburguesa y lo pido así para poder compartirlo con más personas (se me antoja muy grande la porción).



A veces ordeno el combo con malteada de macadamia (mi favorita de El Corral) pero a veces toca cuidarse alguito y ese alguito implica reemplazarla con Sprite Light (400 calorias menos que el cuerpo agradece).
En el centro hay 3 restaurantes El Corral, uno al lado de la U de la Salle, otro en el Centro Gabriel García Márquez (Gourmet) y otro en el Centro Internacional y si, el precio se sale de lo que normalmente se puede considerar barato o accesible... pero es sin duda una de las mejores hamburguesas que se pueden comer en Colombia.

domingo, 13 de diciembre de 2009

Pizza Mia

Ya conocía restaurantes italianos en el centro desde épocas universitarias; este lo conocí trabajando a una cuadra del mismo. Su fachada no expresa nada interesante...



...pero adentro es a otro nivel: Unas pastas que se me antojan deliciosas, tal vez mal hechas para el puritano que las exige en el punto exacto (al dente)... pero la cualidad de estas consiste en las generosas dosis de mantequilla con que son preparadas... y hablando de la mantequilla, es una delicia por si misma cuando la sirven en bolitas con pan francés caliente, para ser untada mientras llega el plato elegido (que suele demorarse y termina uno pidiendo más pan que con esa mantequilla combina tan bien)



Mi recomendado? los escalopines que, como muchos otros platos, vienen con abundantes porciones de pasta y raviolis. Otro recomendado es la lengua (que es pantagruélica) y el osobuco que siempre está delicioso y bien presentado... y es que no hay mucho para elegir tampoco, y me parece bien porque creo que cuando un menú es corto, la probabilidad de que el plato sea bueno aumenta significativamente.



Antes tenían unas sillas realmente extrañas y un decorado más bien afrancesado, esto ha cambiado y ahora es más austero y pensado en maximizar el espacio... afortunadamente la calidad de la comida no se ha visto comprometida.
Dónde?: Costado oriental de la carrera 9a un poco al sur de la calle 17. Cuánto?: Cerca de los 15 mil, pero si el plato parece grande también preparan medio.

viernes, 11 de diciembre de 2009

Hamburguesa en El Galápago

En Chía existe un tesoro gastronómico poco comentado pero muy apreciado entre los iniciados: El Galápago, un buen restaurante de carnes al cual voy por su magnífica (monstruosa? obscena?) hamburguesa con champiñones...



Es simplemente exquisita porque es al carbón y además es descrestadora si se lleva a un neófito o a un extranjero. Es tan grande que no vale la pena pedirla en combo, la sola hamburguesa se encargará de entretener al comensal durante un buen rato y su sabor no se vuelve monótono por los distintos visos que suele dejar una parrilla en las carnes.
Si no la puede terminar, pida el resto para llevar... esta es de esas que después de cierto tiempo produce ansias de volverla a comer.
Dónde?: Carrera 10 No. 13-43 Chía (Cund.). Cuánto?: Esta vale como 11 mil pesos... muy barata si se compara con otras hamburguesas de similar calidad.

martes, 8 de diciembre de 2009

Cucarrón


Yris me trajo un cucarrón de chocolate del Astor. Siempre me han parecido curiosos; es apenas la costra, el interior es vacío y por eso no es tan masivo como pudiera pensarse. En esa pastelería de Medellín hacen cosas muy buenas, como la Bitra (chocolate amargo), los famosos Moros y lo último que probé fueron los bombones de chocolate, toda una delicia que vale la pena intentar.

viernes, 4 de diciembre de 2009

El Miti-Miti

Este restaurante no se llama así, pero si una de sus atracciones. Queda localizado detrás de la Catedral Primada en un segundo piso. Mi plato favorito es la pechuga napolitana, que viene casi sumergida en una salsa de tomate (natural) y trae aceitunas, orégano, una capa de queso y panecitos con mantequilla de ajo.



Pero por un excelente precio se pide también un almuerzo que llena perfectamente a dos personas: el miti-miti, en el cual se escogen dos platos principales del menú... el más popular consiste en escoger los frijoles...



...y acompañarlos con sobrebarriga. Es una buena opción si se tiene mucha hambre y les garantizo que los sabores son muy bien logrados.

martes, 1 de diciembre de 2009

Smooth



Desde niño me ha gustado meter un yogurt en la nevera y dejar que se congele para luego comerlo. Claro, existe el Yogen Früz, pero de esta manera artesanal también se obtiene un delicioso postre.

Mi experiencia indica que el mejor para estos menesteres es el Finesse; si se agita bien antes de congelar y la temperatura baja rápidamente, queda muy suave y se pueden sacar láminas muy delgadas de escarcha que se derriten apenas tocan la lengua.

Para que un helado quede suave lo importante es evitar la formación de cristales, por eso agitarlo algunas veces en el mismo proceso de congelación puede ayudar bastante.

miércoles, 25 de noviembre de 2009

Frijolada

Dónde preparan los mejores frijoles? En Bogotá, según mis cálculos 2 de cada 3 restaurantes caseros sirven frijoles al almuerzo; no es difícil salir satisfecho con este plato; a mi me gusta que su textura sea suave, que con la mera presión del tenedor se abran y que de hecho algunos ya vengan parcialmente desleídos.



Pero no todo está en el ingrediente principal, también ayudan mucho otros que le acompañen y es por eso que la frijolada de Fuego Verde se lleva los honores; verán, trae carne desmechada, granos de mazorca, aguacate, papas fritas trituradas, chicharrones bien hechos y viene acompañada de arroz y una arepa que se nota que la frien un poco con mantequilla. El resultado lo sirven en una cazuela y a esta yo le agrego el picante de la casa (el cual es muy bueno).
La que se ve en la foto corresponde a la pequeña, apenas para el almuerzo, nunca me he atrevido a pedir la grande (no existe mediana) porque si con esta quedo bien...
El restaurante queda en sobre la calle 13, costado norte arriba de la séptima.


lunes, 23 de noviembre de 2009

Desayuno



Hay días, especialmente los viernes, en los cuales todo lo que quiero en la mañana, después de clase, es acercarme a un Juan Valdez y pedir un café y una deliciosa dona de miel, que viene glaseada; es lo que yo llamo un desayuno de policía (gringo). También pido a veces la galleta con chips de chocolate o el rollo de canela; todos se combinan perfectamente con un café, el cual prefiero sin azúcar para equilibrar lo dulce.
Pero si he de ser sincero, muchas veces compro una pera (un pan relleno con bocadillo y costra azucarada) en la panadería adyacente y el café si en Juan Valdez. A las 9 de la mañana esos sabores me alegran el día.

domingo, 22 de noviembre de 2009

La hospitalidad colombiana

Cada vez que mi hermana se va yo me quedo pensando en cuándo volverá; no solo porque la extrañe sino también porque solemos ir a comer o almorzar juntos, ojalá a lugares que no conozcamos pero también los tradicionales.

La última vez nos visitó con varias amigas no colombianas, que durante una semana la acompañaron y regresaron con sus estómagos llenos (y bastante). Yo, el último dia de su viaje, mientras degustaba un delicioso filet mignon acompañado por una salsa de champiñones reflexionaba también sobre lo que significa la hospitalidad en Colombia.




En Colombia, la hospitalidad equivale a dar de comer; queremos que aquellos que nos visitan se lleven un buen recuerdo el cual no es tanto visual como degustativo. Queremos deslumbrar con sabores y que se nos recuerde como un grato descubrimiento gastronómico. Está en cada familia que conozco, son pocas las que no agasajan a sus huéspedes con comida y el mejor plato se prepara cuando llega una visita que consideramos importante y si no se tiene una cocina cerca, al menos habrá un buen restaurante.

Buen restaurante no significa costoso o ni siquiera elegante, el sabor del plato es lo principal; que dé gusto comerlo desde el primero al último bocado, que no sea monótono ni indescifrable, desde un simple caldo de papa con costilla hasta una elaborado ajiaco, todo vale, ni siquiera tiene que ser comida local solo tiene que ser apetitosa.

Ya lo decía una amiga francesa "ustedes solo piensan en comer"; lo que no es cierto, solo queremos que nuestra visita pruebe la enorme variedad que podemos ofrecer y eso representa tanto tiempo que terminamos haciendo de las tres comidas todo un evento. Mañana, tarde y noche deben tener algún elemento novedoso y no es raro que por esa razón terminen ganando algunos kilos cuando vengan por estas tierras.

Asi que ya saben, si vienen a Colombia (y creo que es normal en casi cualquier país latinoamericano) preparen sus estómagos; y si quieren ir a almorzar algo relativamente normal, algo del dia a dia bogotano, en este blog pueden encontrar una humilde guía.